“Una joya en el océano”

Esta fue nuestra cuarta visita. Cálidamente acogedor como siempre, con habitaciones limpias y cómodas y un excelente desayuno. Pero lo mejor del hotel es el personal extraordinariamente servicial. Siempre es un placer estar aquí.

“Buen hotel para unas vacaciones en Castiglione della Pescaia”

El personal del hotel fue realmente amable y servicial. Teníamos una habitación con un balcón orientado al este con vistas a la Reserva Natural Diaccia Botrona y al puerto. Eso nos gustó mucho. El hotel tiene una ubicación céntrica, a poca distancia de restaurantes, chiringuitos y heladerías. El ho… Más

El personal del hotel fue realmente amable y servicial. Teníamos una habitación con un balcón orientado al este con vistas a la Reserva Natural Diaccia Botrona y al puerto. Eso nos gustó mucho. El hotel tiene una ubicación céntrica, a poca distancia de restaurantes, chiringuitos y heladerías. El hotel está muy cerca del puente sobre el Bruna, por lo que el aparcamiento del hotel o las playas al otro lado del Bruna están a sólo 10 o 15 minutos a pie. Puedes realizar recorridos en bicicleta con las bicicletas gratuitas del hotel (sin cambio). Nos pareció muy bueno poder dejar el aire acondicionado a temperatura baja durante el día para que la habitación estuviera agradablemente fresca por la noche. El hotel dispone de una pequeña terraza en la azotea desde donde se puede contemplar la salida de la luna llena. Esto nos pareció muy romántico. También se pueden servir bebidas en la terraza de la azotea. Hay que tener en cuenta que debido a su ubicación en la calle que bordea el puerto se oye el ruido del tráfico. Probablemente también haya habitaciones que den al patio interior o cuyas ventanas den a otro edificio, por lo que no se tendrá ninguna vista. Al reservar, debe prestar atención a la categoría de habitación que reserva y a las vistas que puede esperar. Desafortunadamente, también hubo algunas cosas menores que nos molestaron: Las unidades de aire acondicionado de las respectivas habitaciones se encuentran en los balcones. Nos gustó dormir sin aire acondicionado pero con la puerta del balcón abierta. Escuchábamos constantemente el ruido de las unidades de aire acondicionado en los balcones vecinos. La única máquina de café del restaurante de desayunos siempre llenaba las tazas con tanto capuchino que a menudo las tazas se desbordaban. Los platillos eran demasiado pequeños para las tazas de café, por lo que éstas resbalaban constantemente y casi se caían cuando las llevabas a la mesa. Las bicicletas del hotel no estaban en mal estado técnico. Dato curioso: la cerradura de la puerta del baño estaba en el costado del dormitorio. Por cualquier razón. Conclusión: volveríamos.

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“Conveniente y confortable”

Nuestra estadía de cinco días tuvo un mal comienzo cuando nos mostraron nuestra habitación, lo cual estuvo bien, excepto que el baño de al lado estaba justo en contra de la cabecera de nuestra cama y las actividades del baño dejaron poco a la imaginación. Pero cuando pedimos un cambio de habitación… Más

Nuestra estadía de cinco días tuvo un mal comienzo cuando nos mostraron nuestra habitación, lo cual estuvo bien, excepto que el baño de al lado estaba justo en contra de la cabecera de nuestra cama y las actividades del baño dejaron poco a la imaginación. Pero cuando pedimos un cambio de habitación no hubo ningún problema. Nuestra habitación en el tercer piso era bastante espaciosa y tranquila. No hay más quejas. El personal del hotel era absolutamente excepcional, las áreas públicas eran hermosas, y la sala de desayunos en el cuarto piso era excepcional, al igual que el desayuno en sí (incluido). Todo, desde tocino y huevos hasta todo tipo de deliciosos panes, fruta fresca, quesos y salami, y un excelente café, incluido su capuchino, café expreso y Americano. El hotel se encuentra en una ubicación muy buena, conveniente para los amantes de la playa e igualmente bien para el resto de nosotros. Hay muchos buenos restaurantes a poca distancia, y una buena caminata de 20 minutos a través de la ciudad hasta el castillo y las iglesias medievales, y una magnífica vista hacia el océano. El hotel también tiene su propio restaurante, que los viernes por la noche cuenta con un extraordinario buffet. Pero cuidado, esto es Italia y la primera porción es a las 8 p. metro.

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