“A veces el lujo es que uno lo perciba y los demás no se den cuenta.”

Gran hotel. Lo tiene todo. Lujo, discreción, amabilidad, atención. Para los que quieren lo mejor pero además prefieren no llamar la atención. La situación es inmejorable y la sensación que se tiene es la de un hotel a la antigua (con toda la modernidad que tiene cualquier otro). No da la sensación… Más

Gran hotel. Lo tiene todo. Lujo, discreción, amabilidad, atención. Para los que quieren lo mejor pero además prefieren no llamar la atención. La situación es inmejorable y la sensación que se tiene es la de un hotel a la antigua (con toda la modernidad que tiene cualquier otro). No da la sensación de ser de una cadena hotelera (ignoro si lo es) pero el trato es el de un hotel que busca tu felicidad (sin molestarte cuando no los necesitas). Me ha gustado mucho, mucho.

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“Lujo con detalles exquisitos”

Probablemente el mejor hotel de Irlanda. Una estancia lujosa, sobria, impecable hasta el más mínimo detalle. Cuenta con 4 casas victorianas con habitaciones clásicas, dotadas de todas las comodidades esperables de este nivel de hotel, con un cuidado exquisito en aspectos como las amenities de Aspre… Más

Probablemente el mejor hotel de Irlanda. Una estancia lujosa, sobria, impecable hasta el más mínimo detalle. Cuenta con 4 casas victorianas con habitaciones clásicas, dotadas de todas las comodidades esperables de este nivel de hotel, con un cuidado exquisito en aspectos como las amenities de Asprey, la calidad de la cama y sábanas. El hotel es coqueto, elegante y refinado. Cuenta con maravillosos rincones, spa y un jardín. Altamente recomendable

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“Una obra de arte hecho hotel.”

Han sido cuatro noches de lujo, en un hotel de lujo, muy bien situado, y en donde se respira arte y confort por los cuatro costados. La habitación es muy amplia, con vistas a un patio interior perfectamente cuidado y con mucha luz. Su desayuno es clásico pero en un comedor muy amplio y confortable.… Más

Han sido cuatro noches de lujo, en un hotel de lujo, muy bien situado, y en donde se respira arte y confort por los cuatro costados. La habitación es muy amplia, con vistas a un patio interior perfectamente cuidado y con mucha luz. Su desayuno es clásico pero en un comedor muy amplio y confortable. La verdad que nos hemos sentido como en casa, y nos ha quedado mucha pena de no poder haber utilizado el Spa, ya que estaba en obras.

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“La magia esta en los detalles”

The Merrion tiene magia y encanto. Cada detalle de la experiencia está cuidado con emero desde el momento del check in. Si tienes tiempo reserva una cena en su restaurant. Definitivamente un lugar para considerar de paso por Dublin.